Cuando en 1951 Carl Barks creo para Walt Disney a los “Beagle Boys” (literalmente “Los Muchachos Sabuesos”, conocidos en estas playas como “Los Chicos Malos”), nunca hubiera podido imaginar que —tan sólo en unas pocas décadas— lo que comenzó como una humorada terminaría convirtiéndose en una moda mundial.Cuando Disney lanzó la historieta, quedaba muy gracioso ver ladrones andando por ahí haciendo gala de su condición, con antifaz y traje de preso, “plancha” y gorrita incluídas. Hoy ya no, porque millones de jóvenes se disfrazan de aspirantes a presos, haciendo gala, orgullosos, de su pertenencia a un sector de la sociedad que vive al margen de la ley.
A la entrada de la Villa Miseria de mi barrio como yendo para el centro, a una cuadra de la principal boca de venta de pasta base, abrieron un mercadito al que bautizaron —precisamente— “Los chicos Malos”, y pusieron un cartel con sus sonrientes y enmascarados rostros. Fue por eso que relacioné una cosa con la otra. ¡“Los Chicos Malos” de Walt Disney fueron los primeros “Planchas” de la historia! Ya era hora de que se hiciera justicia (¡qué paradoja! ¿no?) y comenzaran a recibir sus merecidos homenajes…
