(y a mi no me importa mucho que digamos)

jueves, 19 de noviembre de 2009

HISTORIAS DE FANTASMAS

"Ayer fuimos al Museo Blanes con la escuela" -me cuenta la hija de 9 años de mi amigo K. "¿Te gustó?" -pregunto yo. "Síiii, vimos las catacumbas por las que anda la niña muerta y la cascada en la que aparece la llorona" -me responde con aire misterioso. "¿¡Cómo!?" -me sobresalto yo. "¿Quién te contó eso?" -pregunto alarmado. "Nadie -responde la niña- lo buscamos en el Google". Respiro aliviado.

Siento alivio, pero también siento alarma. Alivio, porque por un momento pensé que algún guía o funcionario del Blanes andaba contando esas cosas a los escolares visitantes; y alarma porque me dí cuenta de que han de ser millones los niños del mundo que dan por verdadero todo lo que aparece en la web, y que con la escuela no alcanza.

En este caso, traté de explicarle a la niña que no podía creer todo lo que leía "en el Google", y que eso de los fantasmas de la niña muerta y la niña que llora eran leyendas inventadas por alguien con ganas de embromar. "¿Vos alguna vez viste un fantasma? -le pregunté, y la pequeña me dijo que no con la cabeza- Bueno, yo tampoco y ya tengo 55 años. Los fantasmas no existen, son como las películas de Viernes 13, fantasías para entretener. ¿Entendés?" -le dije.

"Si, claro" -me respondió la niña, y haciendo un link lógico agregó: "Yo creo mucho en Dios", con lo que me impidió insistir en el asunto de "si no lo veo no lo creo". Entonces le dije que si creía en Dios no podía creer en los fantasmas. Y la niña hace otro enlace lógico y me pregunta: "¿Y el Diablo?". Y como no me gusta inmiscuirme en el apartado del derecho de la Patria Potestad de criar cristianos o hinchas de Peñarol, terminé la conversación afirmando rotundamente que "ese no sirve para nada, pierde en todas las películas ¿no viste?". "Si, ví", me contestó la niña y se fue a hacer cualquier otra cosa mas entretenida que hablar de escatología conmigo.