(y a mi no me importa mucho que digamos)

lunes, 25 de agosto de 2014

¿DONDE DIJO QUE ERA?



Cuando le dije al taxista que me llevara a la calle Verdi esquina Verdi, el tipo me miró fijo y me dijo: "Hágame el favor de bajarse antes de que lo baje yo de una piña". "No, pero es en serio le dije", y saqué el mapa antes de que el taximetrista terminara de arremangarse la semi idem derecha de la camisa.
"Acá quiero ir", le dije y le mostré la esquina de la Plaza Fabini y la calle Verdi. "Bueno", dijo el tipo no muy convencido, porque el mapa no probaba nada.
Hicimos el viaje en un profundo silencio y no fue sino hasta que llegamos allí que al taximetrista le volvió el buen humor. Bueno, más que eso. El tipo miraba el cartel y entre carcajada y carcajada decía:
"¡No puede ser! Jaaa ja ja ¡No pueden ser tan boludos, no pueden! Jaaaa ja ja ¡Qué boludez, mi amigo, qué boludez!" y como se seguía riendo le dejé la plata y me fuí.
La circunvalación de la Plaza Fabini (dicho sea de paso el monumento brilla por su ausencia, sólo queda el pedestal de cemento, ni la placa de bronce se salvó) se llamaba hasta hace poco "Plaza Fabini" (como lo atestigua la última foto), del mismo modo que la circunvalación de la Plaza Independencia se llama "Plaza Independencia" etcétera. Pero en la Intendencia a alguien se le ocurrió que no, que debía llamarse "Verdi". que es la única calle que conserva su nombre luego de atravesarla. Es así que ahora tenemos no una, sino dos esquinas de Verdi y Verdi.
¡Cómo me gusta cuando las autoridades se ocupan de asuntos tan importantes como éste y mejoran así, tan sustancialmente la calidad de vida de los montevideanos!

Postfacio al 13.04.14: Hoy pasé por esta plaza y he visto con beneplácito que ha sido totalmente remozada, incluyendo la reposición del monumento a Fabini