(y a mi no me importa mucho que digamos)

viernes, 11 de junio de 2010

LA FIFA, LA MAFIA, EL GOBIERNO, Y ROBESPIERRE

Leo en Le Monde Diplomatique de Junio un pequeño dossier sobre los negociados y los chanchullos de la FIFA. Yo pienso que todo gobierno honesto debería combatir a las mafias o por lo menos mantenerse lejos de ellas. Sin embargo. la mafia del fútbol tiene una coronita aparte, pues además de los amoríos con su canal de televisión (¿recuerda que transmitió en directo las deliberaciones del Tribunal de la Haya? este gobierno mantiene un ministro ex dirigente futbolístico, y el anterior fue presidido por otro. ¿Hay gusanos sanos en las manzanas podridas? No lo sé. Yo, por las dudas desecho las manzanas podridas a priori. ¿Qué soy un extremista? Si, no lo puedo negar. Soy un “extremista pasivo” que lo único que hace es escribir estas cosas, a ver si alguien acusa recibo y actúa, ya sea dándome bolilla, ya sea dándome por la cabeza. Por lo general no sucede ni lo uno ni lo otro.Todo el mundo se hace el oso. Es que mis análisis son incómodos, y mas vale dejarla por esa que andar perdiendo el tiempo contestando a un tipo al que –llegado el caso – resulta muy fácil decir que no se le conoce. Antes me importaba y me amargaba. Ahora que he asumido que la mayoría de los políticos son mezquinos mequetrefes, mefíticos mendaces, y mediocres mentecatos (por no abundar), sé que no puedo esperar otra cosa de ellos. No, no me enojé, me enganché con ese montón de palabras que comienzan con “me”, y tuve que detenerme porque en determinado momento me dí cuenta de que estaba diciendo cosas que no pensaba, tan sólo para que mi prosa rimara, cosa que suelen hacer algunos politicos y por eso el mundo anda como anda. Y no puedo evitar pensar en Robespierre, que por algo perdió la cabeza...