(y a mi no me importa mucho que digamos)

lunes, 24 de agosto de 2009

LA TORTUGUITA DESNUDA

Miro por la ventanilla y veo una gran caricatura de una tortuguita con una mochila que dice “Rutatur” en lugar de su caparazón. Está pintada en un ómnibus de esa compañía estacionado en Bulevar y Montecaseros, es su logotipo, su mascota. Es raro ¿no? La pobre tortuga perdió su “casita” y ahora tiene que andar desnuda y con una mochila de Rutatur a cuestas... Pero lo más raro es que mientras otras empresas eligen como símbolo o mascota a animales que simbolizan la rapidez (el galgo de Greyhound y Onda; la paloma de Cita; el ala delta de Ega, etcétera), Rutatur eligió al animal que simboliza la lentitud (solo superado en este aspecto por el caracol). ¿Será que Rutatur es una empresa muy responsable y consecuente y al final, como en la fábula de Esopo igual llega antes a pesar de ir despacio? No me parece, el otro día yo ví andando un ómnibus de Rutatur e iba bastante rápido, le diré. De todas maneras me impresiona eso de una tortuga sin caparazón. A lo mejor los publicistas de Rutatur no saben que tortuga y caparazón son una misma cosa, a lo mejor se creen que es como en los dibujitos animados, que la tortuguita se saca y se pone el caparazón según convenga. Vaya uno a saber. Las cabezas de los publicistas son un misterio, ni Dios Padre Todopoderoso sabe qué es lo que hay ahí dentro.
Otra versión: la tortuguita ya dejó su mochila en el portaequipaje.